lunes, 20 de enero de 2014

MUSEO DE LAS PATATAS (Hermanos Guío)

Museo de las Patatas, Hermanos Guío, Calle Ferrocarril 21, Madrid - Patatas bravas Calle del Ferrocaril, 21



El otro día nos fuimos de cultureo y nos acercamos a uno de nuestros museos favoritos: "El Museo de las Patatas". Fundado en 1980, hace esquina entre las calles Ferrocarril y Batalla del Salado (qué nombre más épico para una calle...). Se ve a kilómetros, casi casi desde Toledo, debido a sus lucecitas y carteles que proclaman la grandiosidad de sus patatas.  Una vez dentro continúa la feria, con carteles como "Que no te den gato por liebre, no vale cualquier patata" o "Las mejores de to' Madrid". Son las reinas de la casa.

Es un bar a la antigua usanza con su barra de chapa en chaflán y una terraza cubierta, de esas que se llevan ahora. Lo regenta el entrañable Ramón, no perdáis la oportunidad de charlar con él y os contará alguna batallita memorable. 

Dado que el tiempo no acompaña en estas fechas, decidimos acomodarnos en la barra y pasar de terracita de moda. Pedimos unas cañas Amstel y, como no podía ser de otra manera, las acompañó un plato de patatas. Tienen bastantes variedades: amorosas, a lo pobre, bravas, revolconas, al ajillo...En este caso nos tocaron éstas últimas y estaban para chuparse los dedos. En la segunda ronda suelen poner un fabuloso surtido de panchitos, kikos y garbanzos saltaempastes, pero nos sorprendieron con otro rico patateo, esta vez "a lo pobre"o "semibravas" tal y como las llama el bueno de Ramón.

Llegados a este punto nos entró la duda de si pedir las bravas o no, porque ya estábamos empatataos, pero nos debemos al blog y fuimos a por ellas. Por 4'50 € sirven un buen plato en el que destaca un invitado totalmente inesperado: ¡¡¡huevo cocido!!! será el toque de la casa, pero pintar...no pinta mucho. La salsa es bastante floja, muy insípida y justita de picor, el cual se nota a posteriori. No está a la altura. Las patatas, por su parte, sí que están muy buenas, con tamaño y textura ideal. Realmente pueden presumir de ellas. Nos pareció la peor ración de las tres, lástima.

SALSA: 4
PATATAS: 9
CANTIDAD/PRECIO: 8
OTROS: 8'5

TOTAL: 5'9

Si se tratase de valorar las patatas y el bar en general, desde luego que sacaría más nota. Pero aquí nos dedicamos a valorar bravas y la salsa no nos gustó. Salimos con cara de Mr. Potato, pero claro está que no se va al Museo de las Patatas a comer almejas a la marinera...

martes, 7 de enero de 2014

LAS BRAVAS

Las Bravas, calle Alvarez Gato 3, Madrid - Patatas bravas Calle Álvarez Gato, 3



Las Bravas es uno de los más típicos y reconocibles establecimientos del centro de Madrid. De hecho, como ya comentamos en nuestra primera entrada, este es uno de los posibles lugares de nacimiento de nuestra amada ración.

Existen tres tabernas Las Bravas en Madrid. La primera y original la encontramos en el famoso Callejón del Gato, desde 1933, con sus espejos cóncavos y convexos que Valle-Inclán inmortalizó en "Luces de Bohemia". En un principio se trataba de un pequeño bar de vinos y licores que fue creciendo hasta incorporar, a mediados del siglo XX, la tapa que hoy le da nombre. Tal fue el éxito cosechado que decidieron patentar la salsa, y abrieron otros dos establecimientos muy cerca, en las calles Espoz y Mina y Pasaje Matheu. 

Siempre está hasta la bandera, siendo un lugar de obligado paso para los turistas. Además, no falta su carta en varios idiomas para que ni un sólo guiri pueda escabullirse. Y su emblema es una patata con cabeza de torito bravo...Imaginamos que en algún momento de su historia debió perder el encanto de tasca madrileña para convertirse en un McDonald's a la española. Vamos, que es tan castizo como comerse una paella en la Plaza Mayor.

Cuando llegamos solo quedaba una mesita libre, la que nunca quiere nadie por estar al lado del baño, que encima tiene puertas de las del Oeste... Pedimos dos cañitas San Miguel que no se las saltaba un galgo (siempre las sirven dobles), por supuesto sin tapa ya que jamás ponen, obligándote a pedir la ración de bravas de inmediato. Menos mal que son baratas, 3,65€ un plato mediano con los tenedores haciendo las veces de banderillas. Todo muy torero...

La salsa es la reina de la casa. Está muy buena y picante aunque no son muy generosos a la hora de bañar las patatas. En nuestra opinión, su patente (nº 357942) está bien merecida. De aspecto y sabor se parece bastante a la del Docamar, lo cual son palabras mayores. De las patatas, desgraciadamente, no podemos decir lo mismo. Son más bien patatones que cuecen antes de freír, lo que hace que la patata se deshaga hasta el punto de casi no poder pincharla. Al final se queda por un lado la parte frita y por otro la cocida. En fin, que comparar la salsa con las patatas es como comparar a Dios con un gitano.

SALSA:  9'5
PATATAS: 1'5
CANTIDAD/PRECIO: 7'5
OTROS: 5

TOTAL: 7'3

Si pasas por esta histórica y entrañable zona del Madrid de los Austrias no está de más que pruebes esta salsaca, a pesar de que el resto no esté a la altura.